A lo largo de los últimos 24 años, enfermería ha sido testigo del desgobierno del sector de la salud en Colombia, el cual se apalancó con el modelo de negocio de la salud que inauguró la Ley 100. Desde ese momento y hasta el presente nuestra profesión ha sido testigo impotente y subordinado del desmantelamiento de las instituciones, la expulsión y tercerización de centenares de enfermeras y recursos humanos no médicos en todos los niveles de complejidad de la atención hospitalaria y comunitaria, y la carrera por la desprofesionalización de la atención en salud.

Inmersa la enfermería en este vergonzoso escenario de destrucción y muerte que nada tiene que ver con nuestro conocimiento, principios y valores, y siendo la nuestra una profesión del mundo, hemos tenido que batallar para asistir y cuidar silenciosamente a miles de compatriotas inermes que se enferman más o mueren a causa de los muy malos servicios. El Estado colombiano HOY no proporciona salud y seguridad en salud a las personas sanas o enfermas, y por tanto podemos afirmarlo no es garante de la vida desde el campo de la salud.

El próximo domingo 17 de junio de cara a las elecciones para el más alto cargo y dignidad de la nación: la Presidencia de la República de Colombia, contamos con una oportunidad histórica de ser agentes de transformación y cambio en favor del cuidado de las personas y la preservación de la vida humana, de participar numerosamente para reconstruir el sector con una visión desde el interés general sobre el particular con un ideario en favor de la salud como un derecho humano fundamental, como un bien público inalienable no transable.

La coalición de organizaciones, movimientos, partidos políticos, grupos sociales y personas que de manera creciente y veloz se ha volcado expansiva, representa la opción UNICA por una Colombia Humana, la cual no nos es ajena y hace posible poner a andar la enorme capacidad, conocimiento institucional y experiencia de la profesión de enfermería desde la concepción y practica del Cuidar en todas las dimensiones y niveles que le son propios al sector de la salud. La salud debe ser comprendida y llevada a efecto como un motor vital de desarrollo de la sociedad. Nuestra decisión es por la Colombia Humana.

Les proponemos consolidar la mesa por la salud como derecho haciéndola inclusiva a todas las profesiones y ocupaciones de la salud, en la que trabajemos juntos por el cambio del modelo de salud dirigido a restaurar y ofrecer confianza y seguridad a los colombianos.

Compartimos la esperanza. ¡Los colombianos merecemos contar con un mejor destino y con una mejor salud que haga viable poder andar y disfrutar la vida!

Organización Colegial de Enfermería – OCE

Bogotá D.C. 15 de junio de 2018